Por: Jonathan Zuloaga
Teniendo como principal objetivo aminorar la volatilidad que ha observado recientemente la divisa mexicana, particularmente a raíz de que Donald Trump llegó a la presidencia de Estados Unidos, la Comisión de Cambios (CC), conformada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y el Banco de México, anunció el 21 de febrero un nuevo mecanismo para nuestro país, que pondrá a disposición de las instituciones de crédito locales el próximo mes, en programa que estaría alcanzando los 20 mil millones de dólares.
El instrumento, descrito por Banxico como liquidable al vencimiento por diferencias en moneda nacional (esto es, con los pagos futuros neteados en pesos, por lo que no habrá afectación en las reservas internacionales), tendrá tres componentes principales: el plazo, el monto y un valor determinado para el tipo de cambio del peso frente al dólar. De esta forma, las instituciones financieras que busquen asegurar un tipo de cambio para un plazo menor a 12 meses podrán contratar una de estas coberturas.[1]
Según el comunicado publicado por la CC y en espera de que se den a conocer las reglas que sean determinadas por el banco central en el Diario Oficial de la Federación, las principales características de este mecanismo son las siguientes:
- Las instituciones de crédito del país podrán presentar posturas por estos instrumentos por el tipo de cambio que quieren cubrir (mayor al spot de ese momento).
- Las instituciones de crédito que participen en las subastas de coberturas cambiarias con el Banco de México a su vez podrán ofrecer coberturas del mismo tipo a los diferentes participantes del mercado.
- La primera subasta de coberturas se realizará el lunes 6 de marzo por un monto de hasta 1,000 millones de dólares.
- Las fechas, montos y características de las coberturas de las siguientes subastas se determinarán conforme evolucionen las condiciones del mercado.
Otros puntos importantes en el proceso en que se colocaran estas coberturas serán:
- Banxico asignará cobertura a la mayor postura por un monto determinado, pactado en dólares.
- Terminado el plazo de la cobertura, el banco central y la institución financiera tomarán en cuenta la diferencia entre el tipo de cambio fix de ese día y el precio al cual fue pactada la cobertura.
- En caso de que en el plazo de la cobertura el peso se hubiera depreciado, Banxico pagará la diferencia en pesos a la institución por cada dólar pactado.
- Si el tipo de cambio resulta ser menor, entonces sería la institución la que tendría que pagar a Banco de México la diferencia.
Las ventajas que se aprecian en este mecanismo serían primero para la institución que busca cubrirse, ya que al asegurar un tipo de cambio da certeza a su planeación. Por otro lado, después de que otros mecanismos han minado las reservas en otras divisas del banco, con este mecanismo esto no sucedería, algo muy relevante después de las recientes revisiones que han hecho las principales calificadoras crediticias a la perspectiva de la nota de nuestro país.
También, aunque el mecanismo apenas fue anunciado, ha generado una apreciación en la divisa, así que la señal de la CC parece haber sido la correcta en los mercados financieros e incluso algunos analistas han mejorado su perspectiva para el peso en 2017, como Carlos Capistrán de Bank of America, que en una publicación reciente pasó su estimación de 22.5 a 21 unidades por dólar.[2]
Cabe señalar que otras instituciones, como JP Morgan, consideran que este no sería necesariamente un game changer para la divisa mexicana ya que próximamente podría regresar la presión derivada de la renegociación del TLCAN, por lo que la institución se mantuvo su postura pesimista para el peso en el mediano plazo.[3]
Adicionalmente habrá que esperar a la publicación que haga Banco de México sobre las características definitivas de los instrumentos a subastar, el costo que tendría para las instituciones financieras y si estas realmente preferirán recibir este tipo de coberturas, en primer lugar de manos del banco central y también si dada la coyuntura su interés no sería la adquisición de dólares.
Jonathan Zuloaga
El autor de esta síntesis es economista, con 8 años de experiencia como Asesor Macroeconómico y de Mercados en Columbus. Estudiando una Maestría y jugando futbol de lunes a sábado.